¿Qué pasará con tu información digital el día que mueras?

Tanto recorrer la red me encontré con algo que nunca había leído , ni se me había ocurrido pensar en el tema, ¿qué pasa con  nuestra información virtual si mañana nos vamos al patio de los callados?

¿Qué pasará con tu información digital el día que mueras?

Lindo tema; como para levantarle el ánimo a cualquiera.

Hay realidades que son  inevitables, una de ellas, la muerte, aún sabiendo que eso ha de ocurrir, alguna vez te has preocupado de: ¿qué pasará con toda tu información virtual?  Incorporarás  tus  contraseñas al testamento.

Entonces, si nos pusiéramos a pensar, que tal vez  alguien escribiera su último post  y si el sitio está en un lugar gratuito y sin restricciones, durará tanto como dure Internet o hasta que el servicio que ese alguien ocupaba, desaparezca. Pero eso no asegura el final, puesto que se puede dar que  cada tanto, alguien deje un comentario y se pregunte por qué no hay feedback, pero este caso, sería  el mismo que se daría en cualquier blog que ha sido abandonado,  aunque sus administradores tenga excelente  salud.

El día que desaparezcamos de este mundo terrenal y también del virtual ¿qué pasará con nuestro Blog o con nuestro WordPress?  y nuestra cuenta de Facebook ¿se seguirán recibiendo invitaciones, osos panda virtuales y se nos propondrá jugar a la granja o a cerebrito?, ¿ nuestra cuenta de correo  seguirá recibiendo correos, llegará a colapsar?

Bueno… no me mires, no tengo todas esas respuestas ( aún no me he muerto)  y creo que tú tampoco, entonces habrá que averiguar, si es que te interesa heredar tu información virtual.

 GMail tiene un procedimiento con el que algún familiar puede obtener la contraseña de tu cuenta, luego de cumplir ciertos procedimientos, dentro de los que se  incluye enviar una copia del certificado de defunción.

Un comentario en esa misma entrada propone enviar un correo electrónico postdatado con toda la información, mientras estamos  vivos obviamente, e ir cambiando la fecha mensualmente, pero sin olvidarse, pues no será muy agradable recibir un mail diciendo que hemos muerto y que nuestro password es 1234. (jajaja)

Yo no pretendo vivir eternamente, pero tampoco un ratito muy corto, así que continuaré  pensando y preguntándome  si esa marca indeleble que dejamos en Internet muchas veces sin darnos cuenta, es una huella que vale la pena que permanezca o sólo llegará a ser una sombra que se irá diluyendo con el tiempo y que en algún momento desaparecerá, como todo lo demás.

Mientras tanto, tú decides qué hacer…

Fuente:
http://interesesdemujer.wordpress.com/category/intereses-de-mujer/reflexion/